Estamos registrados en muchos servicios (correo, webs de viajes, redes sociales y mil más), en muchos casos con nuestra contraseña. Y en ocasiones -es inevitable- agujeros de seguridad de esos sitios web o aplicaciones, hacen que nuestros datos lleguen a terceros (terceros con malas intenciones, se entiende). Tras un procesamiento de datos, esos terceros, pueden descubrir nuestras contraseñas. No es algo inmediato, porque no se guardan como texto plano. Por ejemplo, la contraseña “hola” podría guardarse como “99800b85d3383e3a2fb45eb7d0066a4879a9dad0”.
La página https://haveibeenpwned.com/ nos ofrece un servicio estupendo: nos registramos con nuestro email y, cuando hay algún agujero de seguridad que haya comprometido nuestros datos, nos informa. De ese modo, sabemos que es necesario cambiar la contraseña.
Recent Comments