Es muy habitual que los profesionales que nos dedicamos a construir páginas web nos encontremos con la siguiente pregunta: “Quiero una página web, ¿cuánto me cuesta?” Lógicamente, es muy entendible que el potencial cliente quiera saber cuánto le va a costar. La respuesta es, obviamente, depende. Así que no podemos responder aquí a esta pregunta, pero sí vamos a enumerar un listado de cuestiones que debe responder quien desea una página web:
- ¿Cuál es el objetivo de esta página? Es decir, para qué se hace la página.
- ¿Qué tipos de usuarios la visitarán? Es decir, para quién se hace la página.
- ¿Será actualizada con frecuencia? Esto determinará si se recomienda o no un gestor de contenido.
- ¿Pensáis promocionar esta página en redes y medios sociales? Hoy en día, la única respuesta posible a esta pregunta debe ser sí. No tiene sentido crear una página y dejarla aislada del mundo.
- ¿Necesitaréis una versión móvil? Otra pregunta que solamente admite la respuesta afirmativa.
En numerosas ocasiones, responder a estas sencillas preguntas ayuda a enfocar el sentido de la página (y también ayuda a organizar la propia empresa). La próxima vez que solicitéis un presupuesto, comenzad por los puntos aquí reseñados. Lo agradecerán vuestro proveedor, vuestros usuarios, y vosotros mismos.
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