Se nos suele decir, con mucha razón, que calidad, rapidez de ejecución y precio están íntimamente relacionados, y que si buscamos optimizar dos de ellos, el tercero se resiente:
- ¿Queremos alta calidad y tener el producto pronto? Habrá que pagar más, o bien para que entren más personas en el desarrollo, o para que las que están trabajen más horas.
- ¿Queremos alta calidad y bajo precio? Pues entonces tendremos que esperar, confiando en que los desarrolladores tengan ratos de menos carga de trabajo para ir completando el nuestro.
- ¿Queremos un precio bajo y tenerlo pronto? No esperes una obra maestra.
Y de la relación entre velocidades y calidades nos habla este vídeo, que os invitamos a ver:
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